Durante años, las empresas han prometido cumplir con los motores de hidrógeno, alegando que el hidrógeno es el combustible limpio del futuro. Sin embargo, hemos visto poco en términos de desarrollo.
Todo esto podría cambiar pronto.
Los fabricantes de automóviles Toyota y Yamaha han unido fuerzas para desarrollar un motor V8 de 5.0 litros alimentado con hidrógeno, según un comunicado emitido por Yamaha este jueves.
Un motor de hidrógeno
El motor de hidrógeno no es del todo nuevo. Está basado en un modelo actualmente en uso por el cupé deportivo Lexus RC F.
Sin embargo, se han realizado muchas modificaciones para convertirse en una versión de hidrógeno con cambios incluidos en los inyectores, cabezales, colector de admisión y otras partes.
Se dice que el motor entrega 449bhp a 6800rpm y 398lb-ft a 3600rpm, algunas características bastante impresionantes. Las cifras son un poco más pequeñas que las del V8 original en el que se basa, pero para un motor experimental recientemente desarrollado, son más que suficientes.
Una sensación amistosa
Y según Takeshi Yamada, un ingeniero que trabaja en el equipo de desarrollo de motores de hidrógeno de Yamaha, el motor seguramente hará feliz a cualquiera que lo conduzca.
«Los motores de hidrógeno tienen una sensación amigable innata que los hace fáciles de usar, incluso sin recurrir a las ayudas electrónicas para la conducción. Todos los que vinieron a probar el prototipo de automóvil comenzaron algo escépticos, pero salieron del automóvil con una gran sonrisa en el rostro ante el fin», dijo Yamada en el comunicado.
Quienes duden de la capacidad de las empresas para entregar el nuevo motor deben tener en cuenta que las dos empresas han tenido colaboraciones fructíferas anteriormente. Unieron fuerzas en el Lexus LFA hypercar V10 de 4.8 litros y 552bhp, una empresa que resultó ser muy exitosa.
Ahora, los fabricantes de automóviles se están enfocando en alternativas más ecológicas.
El presidente de Yamaha, Yoshihiro Hidaka, dijo que: «Los motores de hidrógeno albergan el potencial de ser neutrales en carbono y, al mismo tiempo, mantienen viva nuestra pasión por los motores de combustión interna».
¿Podría ser este el avance del hidrógeno que todos hemos estado esperando?