Ahora, cuando la electrificación y la automatización están ganando terreno, la startup holandesa Rocsys pretende encontrar el equilibrio perfecto. La empresa ha desarrollado una solución: un brazo robótico capaz de convertir cualquier cargador de vehículo eléctrico (EV) en un sistema de carga autónomo.
Esta innovación es particularmente atractiva para los operadores logísticos en puertos y astilleros, donde el tiempo de actividad de los vehículos es crucial y la precisión es primordial. La intervención manual durante el proceso de carga a menudo ha sido un desafío en estos entornos debido a las regulaciones laborales.
Los conductores de camiones, por ejemplo, a menudo no pueden realizar tareas de carga . Para superar este obstáculo y acelerar la electrificación de las flotas, Rocsys cree que automatizar el proceso de carga es imperativo. La carga automatizada no solo puede garantizar el cumplimiento normativo, sino que también puede reducir la exposición humana a equipos de alto voltaje.
Crijn Bouman, director ejecutivo y cofundador de Rocsys destacó la importancia de su solución en entornos peligrosos. «En este momento estamos trabajando en una planta de procesamiento de residuos en Suecia y es un entorno muy peligroso, por lo que el conductor debe permanecer dentro del vehículo», explicó Bouman. Al implementar el sistema de carga autónoma de Rocsys, los trabajadores pueden evitar riesgos potenciales y operar de forma más segura.
Rocsys ya ha forjado alianzas con empresas destacadas como Hyster, un fabricante líder de carretillas elevadoras eléctricas; Taylor Machine Works, un proveedor de equipos industriales. Y SSA Marine, un importante operador portuario. Además, la startup está a punto de finalizar una asociación comercial con uno de los minoristas Big Box más grandes de América del Norte.
Más ambiciones de Rocsys
Pero las ambiciones de Rocsys no terminan con la logística pesada. La compañía cerró recientemente una ronda de financiación Serie A de 36 millones de dólares, destinando los fondos a expandir su división norteamericana y realizar investigación y desarrollo en el sector automotriz.
Rocsys planea colaborar con los fabricantes de automóviles que se preparan para introducir la funcionalidad de valet automatizado en un futuro próximo. Como enfatizó Bouman, la carga automatizada de vehículos eléctricos irá de la mano de estos avances.
De cara al futuro, Rocsys ve casos de uso potenciales para su tecnología en flotas de robotaxis autónomos y vehículos de reparto. Bouman reveló que la compañía ya está trabajando con empresas estadounidenses de vehículos autónomos (AV) para establecer centros de carga para sus flotas de AV.
La gestión de un cargador a gran escala con vehículos autónomos puede resultar exigente, requerir un equipo dedicado y cualquier error puede provocar pérdidas financieras. Rocsys pretende abordar estos desafíos con sus soluciones de carga automatizada.
Una de las características más destacadas de la solución de Rocsys es su capacidad de adaptarse a cargadores existentes y futuros, independientemente de los estándares de carga utilizados. Ya sea CCS, NACS o cualquier otro formato, los equipos robóticos de Rocsys pueden adaptarse. El modelo de negocio de la empresa implica una compra única del equipo robótico y una tarifa de servicio recurrente.
Bouman explicó que el sistema operativo de IA se entrena con los datos de los clientes generados en cada sitio, lo que garantiza una mejora continua y un mejor rendimiento. Rocsys también proporciona conectividad API para una integración perfecta con los sistemas de gestión de flotas, ofreciendo a los clientes una experiencia verdaderamente optimizada.
Actualmente, un robot Rocsys cuesta entre 20.000 y 30.000 dólares, con una tarifa anual de alrededor de 2.000 dólares. Sin embargo, se espera que la próxima generación del producto tenga un factor de forma más compacto y un precio significativamente más bajo: alrededor del 60% del costo actual. Para 2027, Rocsys pretende lanzar el robot de tercera generación a un precio inferior a 10.000 dólares, coincidiendo con el aumento previsto de automóviles con funciones de conducción automatizada que ingresan al mercado.