Con las acciones de Tesla desplomándose un 36% y las ventas en drástica caída, la participación política de Musk está bajo escrutinio. ¿Podrá la compañía recuperarse?
Colapso histórico de Tesla: la peor caída de ventas de la historia mientras Musk enfrenta una reacción política.
Una flota de vehículos Tesla sin vender.
La política y el profesionalismo son como el aceite y el agua: si los mezclas, ambos se vuelven turbios.
Sin embargo, Elon Musk parece no haber recibido esta nota.
Sus profundos enredos políticos ahora están causando un golpe significativo a Tesla, la compañía que ha sido su niña dorada durante años.
Tesla acaba de informar su peor caída en entregas en la historia de la compañía, y los efectos de la controvertida postura política de Musk son innegables.
Tesla reporta caída récord en ventas
Tesla entregó sólo 336.681 vehículos en el primer trimestre del año, frente a los 386.810 del mismo período del año pasado.
Esta caída del 13% marca la caída trimestral más significativa que la compañía ha experimentado jamás. Los analistas anticipaban cifras más bajas, pero incluso los pronósticos más pesimistas superaron la realidad.
La fuerte caída se produce en medio de una creciente reacción de los consumidores contra Musk, impulsada por su papel como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental ( DOGE ) durante la presidencia de Donald Trump.
Las protestas frente a las salas de exposición de Tesla han aumentado y se han reportado actos de vandalismo contra vehículos Tesla y estaciones de carga.
Muchos compradores potenciales parecen estar reconsiderando sus compras debido a la participación política de Musk.
Sin embargo, Tesla no reconoció estas protestas en su comunicado oficial. En cambio, la compañía atribuyó la caída de las ventas a una interrupción de la producción en sus cuatro fábricas debido al cambio del Model Y.
Controversia política y reacción del mercado
Las afiliaciones políticas de Musk no sólo están afectando el sentimiento del consumidor; también están sacudiendo la confianza de los inversores.
Las acciones de Tesla se han desplomado un 36% en los primeros tres meses del año, lo que lo convierte en el peor trimestre para la acción desde 2022. La última vez que Tesla experimentó una caída tan pronunciada, Musk había vendido 22.000 millones de dólares en acciones de Tesla para financiar su adquisición de Twitter, ahora X.
Este trimestre, la capitalización de mercado de la compañía perdió más de 460 mil millones de dólares, una cantidad que excede ampliamente las reducciones del gasto federal que Musk afirma haber logrado a través de DOGE.
A pesar de estas pérdidas, Musk se mantiene firme en su compromiso político.
En un mitin en Green Bay, Wisconsin, abordó la caída de las acciones de Tesla: «Mis acciones de Tesla y las de todos los que poseen acciones de Tesla se han reducido a la mitad. Es un trabajo muy caro, eso es lo que quiero decir».
La competencia y los desafíos económicos avivan el fuego
Incluso sin controversias políticas, Tesla está luchando por mantener su dominio en el mercado de vehículos eléctricos.
Los competidores, en particular el fabricante chino de automóviles BYD, están ganando terreno rápidamente. BYD vendió más de 416.000 vehículos eléctricos puros en el mismo trimestre, lo que representa un aumento del 39 % con respecto al año anterior.
Los modelos más asequibles de BYD, combinados con una tecnología de carga innovadora, los convierten en un competidor formidable.
Además, Tesla enfrenta una creciente presión para cumplir sus largamente prometidas ambiciones de vehículos autónomos.
Musk ha declarado que Tesla lanzará un servicio de transporte sin conductor en Austin, Texas, en junio. Sin embargo, persiste el escepticismo, ya que las afirmaciones previas sobre el software de conducción autónoma total de Tesla a menudo no han cumplido las expectativas.
A pesar de estos reveses, Musk mantiene la confianza. «A largo plazo, creo que las acciones de Tesla van a tener un buen rendimiento», aseguró a sus seguidores en su mitin.