La gente parece considerar al conductor humano como el principal responsable cuando su vehículo (parcialmente) automatizado choca, según un nuevo estudio. Estudiar por el Instituto TU Delft AiTech. Los investigadores afirman que el conductor recibe la mayor parte de la culpa, incluso cuando no puede evitar razonablemente el choque.
En un artículo publicado recientemente en Informes científicos de la naturaleza, investigadores del Instituto AiTech de TU Delft investigaron el aparente desajuste entre la atribución de culpa por parte del público y los hallazgos de la literatura sobre factores humanos con respecto a la capacidad humana para permanecer alerta en la conducción parcialmente automatizada. Los participantes del experimento culparon al conductor principalmente por los choques, aunque reconocieron la disminución de la capacidad del conductor para evitarlos.
Brecha de culpabilidad
El desequilibrio entre los desafíos relacionados con el factor humano con la automatización con respecto a la capacidad del conductor y las atribuciones de responsabilidad del participante revela una brecha de culpabilidad. En este vacío de culpabilidad, la responsabilidad no se distribuye razonablemente entre los agentes humanos involucrados; el conductor recibe la mayor parte de la culpa, pero esto puede no ser razonable dada su capacidad afectada para cambiar el resultado.
Los hallazgos de este trabajo tienen implicaciones. En términos de discurso público, según los argumentos de los participantes, parece que la mayoría de los participantes no consideran los desafíos de la conducción automatizada centrados en el ser humano antes mencionados en su atribución de responsabilidad. Esto podría indicar que los humanos desconocen estos efectos de la automatización, lo que podría conducir a «omisiones involuntarias». Los conductores desconocen el impacto de la conducción automatizada en su capacidad para realizar las tareas de conducción requeridas en caso de que las necesiten, pero sus compañeros aún los consideran responsables. Los investigadores creen que proporcionar información pública sobre los desafíos centrados en el conductor asociados con la conducción automatizada podría ser útil, así como la capacitación de los conductores.