El objetivo de Tesla de llevar los vehículos eléctricos a la corriente principal está cobrando impulso con el crecimiento constante de las entregas de la compañía. A medida que el fabricante de vehículos eléctricos expande la producción, también se espera que la cantidad de vehículos entregados alcance niveles récord en 2022.
Los datos adquiridos por Finbold indican que las entregas de Tesla en 2021 se situaron en 936.172, con un crecimiento del 87,4 % desde la cifra de 499.550 de 2020. En 2019, la empresa entregó 367.500 vehículos bajo diferentes modelos.
Desde que la empresa comenzó a entregar vehículos eléctricos en 2014, el mayor crecimiento anual se registró entre 2017 y 2018 con un 137,8%, de 103.100 a 245.200.
En 2014, 2015 y 2016, las entregas de vehículos de Tesla fueron de 32 000, 50 000 y 76 200, respectivamente.
Con base en el promedio histórico de crecimiento porcentual año tras año de la compañía entre 2014 y 2021, Fibold estima que en 2022 los envíos de vehículos superarán por primera vez el millón para ubicarse en 1.544.402, un crecimiento del 64,9 % con respecto a la cifra del año pasado. Además, el objetivo se verá influenciado por las operaciones en las nuevas plantas de Texas y Berlín.
Importancia de los números de entrega de Tesla
El informe destaca la importancia de las cifras de entrega de vehículos de Tesla y su impacto en el mercado. Según el informe de investigación:
“En general, las entregas de Tesla son una de las métricas más vigiladas por la empresa. La métrica suele respaldar los resultados financieros de la empresa y destaca la demanda del mercado de vehículos eléctricos”.
En general, Tesla continúa aumentando sus entregas anuales de vehículos a pesar de que la industria de los vehículos eléctricos enfrenta desafíos en la cadena de suministro global y la logística relacionada con la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, se sabe que la empresa diseña sus chips internamente para superar la escasez de semiconductores, una ventaja que tiene sobre otros fabricantes de automóviles de la competencia. Al mismo tiempo, Tesla también ha reprogramado el software para usar chips menos escasos.